De balances, agradecimientos y otras yerbas…

Por Rodrigo Romero Bazterrica
 

Y hoy te escribo desde un lugar distinto. Por un rato nos corremos de la política para hablar de otra cosa: hoy quiero aprovechar este espacio para agradecerte a vos que nos acompañaste durante todo el año.

Termina el 2022 y es momento de balances. Si, ya se… Están todos en la misma y es insoportable. Te pido que me banques en esta porque gracias a vos, en Post Político tuvimos un gran año y te lo quiero contar.

Si bien costó, mantuvimos a lo largo del año los diversos envíos de nuestros diferentes Newsletters: #PasaronCosas, #JugadaPreparada, #TipsdelaRevolución, #PuntoSeguido, #Inclusive, #Reperfilando… fueron algunos espacios donde gente querida y amiga de la casa nos brindaron un poco de su arte, de su pluma, de sus ideas. Gracias totales dirían por ahí.

También fue un año cargado de desafíos y de retos, entre ellos, fuimos seleccionados nuevamente por la gente de FOPEA y de Meta Journalism Project (lo que era conocido como Facebook Journalism Project) para ser parte de la Fase 1 del programa FOPEA Emprende. Fueron 4 meses del recontra carajo, todo aprendizaje y la satisfacción de saber/confirmar que vamos por el camino correcto.

Continuamos implementando una idea que surgió allá por aquellos años pre pandémicos: Post Político +. Nuestro laboratorio pensado para medios locales e hiperlocales. Un espacio de capacitación e innovación donde acompañamos a los diferentes medios a dar el salto tecnológico necesario para pensar en clave de las narrativas transmedias que la sociedad actual reclama. Ya hemos podido acompañar en este proceso a varios medios de la provincia de Buenos Aires y vamos por más. A ustedes también: gracias por confiar en nosotros.

En el medio, la vida misma, por fin ganamos la tercera, las cuatro dosis de la vacuna anticovid porque inmunosuprimido, viajes, barbijos everywhere (hasta tengo guardados en la guantera del auto), 12 horas de trabajo por día, la muerte de mi viejo, una canichita preciosa llamada Almita, nuevas propuestas y desafíos para el 2023 y, sobre todo, el aguante fundamental de los cercanos. Imposible lograr nada sin el sostén de la familia, de la pareja, de los amigos, de la gente que confía en uno. ¡Gracias a todos, todas y todes!

De política hablamos otro día, se vienen los 40 años de la democracia… y pareciera que no aprendimos nada.

Una sola cosa más por decir: ¡Feliz año nuevo, nos vemos en el 2023!